Diferencia entre revisiones de «Szeged (HU) Colegio y parroquia»

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Revisión de 21:46 23 oct 2014

Datos

Demarcación Hungría

(1720-1950)

Historia

Este colegio de Hungría no fue fundación de algún particular sino de la ciudad regia y libre de Szeged, que mediante sus magistrados planeó y cuidó la fundación que tuvo lugar en 1720. Los escolapios se obligaron a enseñar hasta la retórica inclusive, no sólo a los niños de la población sino también a los que allí acudiesen. Se les adjudicaba, en ciertas condiciones, una parroquia vacante que debían atenderla; en especial se obligaban a la predicación del Evangelio en algunas fechas. De momento se atendería todo con seis religiosos. A su manutención se dedicaban 800 florines al año. Enseñanza y predicación deberían darse en lengua húngara, alemana e ilírica. Esta era la condición más difícil de cumplir. Se dejaba libertad a la Orden para buscar amigos y protectores a fin de poder mejorar más y más el colegio, su enseñanza y su servicio pastoral. La organización escolar entonces vigente era ésta, según explica el P. Provincial a los muñí cipes (Reg. Prov. 55): «En la escuela de leer el maestro enseña a rezar, las primeras letras, el silabeo y lectura. Un segundo maestro cuida de la escuela de escribir; a éste incumbe enseñar, además de leer impresos, el formar buen carácter de letra y que sepan leer todo tipo de manuscritos; hace aprender de memoria el catecismo y a los capaces y ya perfeccionados en la escritura y lectura, enseña las declinaciones, comparaciones y conjugaciones. Un tercer maestro se ocupa de la aritmética, en la que se hallan los futuros alumnos de retórica, filosofía, teología y derecho; con éstos hay que trabajar seriamente para que se perfeccionen en la escritura y cálculo, que sirven para todos los estados. Un cuarto maestro empieza el latín: si son numerosos los discípulos, se ponen dos maestros para que se instruyan bien. Un quinto maestro atiende a la gramática y sintaxis; si es numeroso el alumnado, se requieren dos profesores. Un sexto maestro es el profesor de poesía y retórica y se basta solo; si el alumnado fuese muy numeroso se dividiría en dos clases con sendos profesores». El Provincial advierte esto, pues según fuere el alumnado, seis profesores no bastarían. Así se pusieron los fundamentos de este centro que llegó a ser el más importante de las Escuelas Pías húngaras después del de Budapest. Según la nueva ordenación escolar el colegio no podía dar el llamado curso filosófico, que era frecuentado en los años anteriores por más de 200 alumnos, recibiendo adecuada preparación para el mismo. En general, puede decirse que nunca le faltó la atención de la ciudad, sorteó los escollos de la política josefinista y los avatares de la revolución de 1848 no menos que las durezas del absolutismo subsiguiente hasta 1867. Diez y ocho años después, en 1885, el municipio levantaba de planta para el colegio un auténtico palacio de cultura. Se conocen algunos datos estadísticos del final del siglo XIX: en 1881, eran 613 los alumnos, para llegar en 1898 a 856; en 1920, 794 alumnos y en 1929 solamente 643; después llegó la segunda guerra mundial. En 1948 la república húngara se incauta de todas las escuelas religiosas y en 1950 el gobierno disuelve las Órdenes religiosas.

Bibliografía

Redactor(es)

  • Claudio Vilá, en 1990, artículo original del DENES I