Soria (ES) Colegio y parroquia Nuestra Señora del Pilar

Mapa de la demarcación

Aviso de contenido Este texto es el original publicado en su día en el DENES. No se ha hecho sobre él ninguna rectificación. Su contenido, pues, puede no reflejar la realidad actual

Datos

Demarcación Aragón

(1953- )

Antecedentes históricos.

Tras un intento de fundación en 1804 y la no aceptación de la misma, hubo que esperar a 1951. Las MM. escolapias habían llegado a la ciudad dos años antes; los PP. Federico Ineva y Valentín Aísa se trasladaron a Soria ese año con motivo de los festejos colegiales. Varios señores sorianos, entre ellos D. Pablo del Barrio, se entrevistaron con los escolapios; insistieron en su empeño de una fundación ofertando como local provisional el «Palacio de los condes de Gomara». Se escriben cartas al P. General, al embajador de España en el Vaticano, Sr. Castiella, al Nuncio en España, etc. Varios padres de familia, el 1-3-1952, envían un escrito al P. General, con los siguientes argumentos: en toda la provincia no existe ningún colegio de religiosos; por el contrario sí los hay de religiosas en Almazán, Santa María de Huerta y Soria, dando educación a más de 2.000 niñas; la buena marcha en concreto del colegio de las MM. escolapias de la ciudad; la necesidad de un internado, dado el carácter agropecuario de la provincia; la laboriosidad, constancia y deseo de superación de la gente de esta tierra pobre contribuirá a un indudable éxito. La respuesta fue negativa por el momento. E insisten ante el obispo de la diócesis. En marzo de 1952, el P. Provincial promete abrir colegio para el curso 1953-1954. Conseguido el permiso, se imponía un compás de espera para solucionar diversas dificultades. La principal era contar con un establecimiento provisional, donde ejercer el ministerio docente. Se ofrece el traspaso del colegio «San Saturio»; D. Miguel Abad, el propietario del arrendamiento y director de dicho centro, lo propone a D. Pablo del Barrio. Se preparan los requisitos y se ponen condiciones a los profesores que impartían las clases en él. Con la visita del P. Provincial en el mes de julio se estima el traspaso de dicho colegio. El 1 de agosto se publicaba en la presa local la inminente llegada de los escolapios: podrían matricular a los niños para el próximo curso escolar. El primer escolapio, Francisco Rubio, llegó el 18-8-1953. Se hospedó en el colegio de las MM. escolapias. Se le prestó un despacho, que fue el lugar de inscripción de los primeros alumnos sorianos. También se envió una circular a todos los párrocos de los pueblos; en ella se indicaba la llegada de los escolapios a la capital, así como su disposición de continuar la obra de San José de Calasanz. A primeros de septiembre llegó el P. Cecilio Arellano; entre los dos prepararon el local y acomodaron las dependencias del colegio San Saturio, para la doble función: aulas de clase y residencia de los religiosos. El 3 de octubre se constituiría la comunidad: Francisco Rubio, Cecilio Arellano, Pedro Sanz, Damián Bello, y José M.ª Arranz. Terminadas las fiestas de San Santurio se abrieron las aulas para 136 alumnos; 88 de primera enseñanza y 48 de bachillerato; 100 eran externos, 23 mediopensionistas y 13 internos. Junto con los escolapios impartieron clases los profesores: Sr. Valenzuela, Sita. Lamuedra y Srta. Elisa Jiménez. Tres años quedaban todavía para llegar a la sede definitiva.

Desarrollo histórico.

La estancia en San Santuario era provisional. Era necesario adquirir nuevos terrenos para la edificación del colegio definitivo. Para el curso 1954-1955 hubo que alquilar locales en uno de los chalets contiguos; para 1955-1956, varias dependencias en el palacio de los condes de Gomara. El 25-2-1955 se realiza la compra del solar de los señores Alonso. Explanado el terreno, comienza la construcción. Se escogió como arquitecto a D. Guillermo Cabrerizo, que lo era del ayuntamiento; constructor, el Sr. Carnicer, que se compromete a terminarlo para el 1 de septiembre, a condición de que el arquitecto no le haga esperar y no exista ninguna circunstancia adversa. Esta llegó el 7 de julio: una orden de Madrid mandaba interrumpir las obras. Con este contratiempo ciertas dependencias no estuvieron listas para el nuevo curso. El 3-1-1956 se traslada la comunidad al nuevo edificio y a las nuevas clases después de las vacaciones navideñas. En 1958, el 2 de enero, se terminó la capilla del colegio y el oratorio para la comunidad. Luego se han realizado reformas: en mayo de 1962 se construye un piso más en toda la ala sur del edificio, destinado para dormitorio de internos, habilitando otros espacios para clases; en el verano de 1976 se hacen tres salas de clases, suprimiendo una parte del dormitorio de internos; al siguiente, se mermó el espacio dedicado a internos y en el verano de 1983 el resto del piso queda convertido en clases; en 1971 se construye el dormitorio de COU, aprovechando para ello el piso-buhardilla del ala norte; en el curso siguiente comienza la ampliación del colegio: se construyen dos nuevos pisos en el ángulo oeste del ala sur, destinados para habitaciones y dependencias de la comunidad; en el verano de 1983 se construyó el gimnasio, aprovechando cuatro aulas de la planta baja del ala sur, junto al frontón.

Pedagogía y pastoral.

El número de alumnos fue creciendo. En el curso escolar 1957-1958, el primero completo en el nuevo colegio, había 509 en matrícula; duplicado en 1975. A partir de esta fecha se da una ligera disminución. En 1957 es reconocido ya el bachillerato elemental. En marzo de 1961, se pide el pronto reconocimiento del bachillerato superior; en el curso 1961-1962, se hacen las correspondientes diligencias y el 3-5-1962 se consigue el permiso. En 1971 se pone en marcha la EGB, de modo progresivo. En el curso 1975-1976 se tiene el primer año de BUP; el COU quedaría suprimido definitivamente, después de impartirlo durante varios años con alumnas de las escolapias, siendo insuficiente el número de matrícula. En agosto de 1973 se obtiene la subvención total para la EGB. El número de internos ha variado; de 1965 a 1975, sobrepasó la cantidad de 200, llegándose a 235 como cifra mayor. A partir de esa fecha se da un descenso vertiginoso, estabilizándose desde 1980 entre 75 u 80. Proceden en su mayoría de los pueblos de la provincia de Soria. Los alumnos han participado en los diversos concursos convocados de literatura, poesía, deporte, teatro, etc. Merece especial mención la «Olimpiada matemática» con una beca de estudios universitarios para el ganador, quedando campeones en 1965 Jaime Vinuesa, y en 1971 José Manuel Gil. En el curso 1974-1975 se crea el «movimiento scout», lo inician los PP. Megino y Enciso; no radica exclusivamente en el colegio, pues reside en la casa diocesana de Soria. Su nombre oficial es «doce linajes». La incorporación del P. Juan M.ª Martínez se realizó al curso siguiente, incrementando las actividades y el número de asociados. A mediados de 1976, el grupo se escinde en dos: el «Numancia», desaparecido en 1981, y «doce linajes» que se inserta en la asociación scout de España en 1977. En el verano de 1978 se instala el campamento en Vilviestre de los Nabos (Soria) y se invita, en el día de las familias, al obispo de Osma-Soria, D. Teodoro Cardenal; a partir de este momento el grupo se une a la labor pastoral de la diócesis, trabajando en la Comisión de pastoral juvenil.

En noviembre de 1976 crea una coral el P. Pau que ha llegado a actuar en diversas ciudades españolas y participado en jornadas y concursos. Como subdirector figura el P. A. Enciso, y D. Manuel P. Seseña es el encargado de relaciones públicas.

El 30-12-1962 se formó la asociación de exalumnos. Su primer presidente fue D. Jesús Marín Sierra; y durante unos años tuvo bastante actividad, organizando conferencias y cine-forum.

Se han concedido las cartas de hermandad, entre otros, a D. Pablo del Barrio, a D. Guillermo Cabrerizo.

En abril de 1976 murió el P. Francisco Rubio, uno de los fundadores del colegio. En 1970 había muerto en accidente D. Pablo del Barrio que tanto influyó en la creación de este centro.

Son muchos los exalumnos de este colegio; algunos han sobresalido, como los médicos, M. A. López, H. Sancho Ruiz, los hermanos C. y J. Delgado Alonso, J. A. Alonso Yagüe, J. M. Ruiz, etc.; otros se distinguen como abogados, así: J. A. Sanz de Santos, A. Heras San Román, E. Heras Poza, J. L. Almajano Esteras, etc.; algunos como catedráticos de la Universidad: J. Vinuesa, J. M.ª Enguita Utrilla, J. Molina, A. Martínez, etc.; R. Celorrio se ocupa del Servicio de Orientación de E.G.B. en la Delegación de Enseñanza en Soria; como arquitectos e ingenieros están: I. Cabrerizo Martínez, P. del Barrio Mayor, A. Llórente Legaz, etc.; también han seguido el sacerdocio: J. P. Burgués, J. L. Cabrerizo Martínez, R. Pérez Herrero, E. J. Almajano García, etc.

Parrroquia.

Tiempo atrás se veía conveniente la creación de nuevas parroquias en la ciudad de Soria. En el obispado de D. Saturnino Rubio, movían esta cuestión varios canónigos y principalmente el párroco de Nuestra Señora del Espino, D. Teógenes Beltrán. Argumentaban con la extensión de su propia parroquia en población, en superficie y con muchas instituciones particularmente sanitarias, que atender. Todos los que promovían esta idea señalaban como nueva sede a la iglesia de los escolapios. El obispo, D. Teodoro Cardenal reanuda las conversaciones; y crea dos nuevas parroquias: la de San Francisco que ocupará la iglesia del antiguo hospital, y la de Nuestra Señora del Pilar con sede en la iglesia de los PP. escolapios.

El día 14-11-1971, con gran afluencia de fieles, es leído, por el Sr. abad de la concatedral, el decreto de erección de la parroquia, y es presentado el nuevo párroco, P. José Pau Meler. El número de feligreses era de 4.130; ha crecido la población teniendo en los últimos tiempos unos 6.000. La acción pastoral de la misma se ha mantenido dentro de los límites y orientaciones diocesanas. Cabe destacar la festividad de la titular de la parroquia, la Virgen del Pilar, participando especialmente la guardia civil, ya que el cuartel se halla dentro de los límites de su demarcación.

Han sido párrocos, además del P. José Pau, los PP. Félix Heredia y Félix Jiménez.

Superiores

Persona	Año
Antonio Señante	1955
Miguel López	1958
Felicísimo Velasco	1961
José M.ª Martínez	1967
Luis Jorcano	1970
Pedro Sanz	1973
Joaquín Navarro	1976
Félix Heredia	1982
Félix Jiménez	1983

Bibliografía

• Archivo de la casa

• Archivo Aragón

Redactor(es)

• Martín Sobrino, en 1990, artículo original del DENES I