Galitzia/El P. Eysymont es recibido con gran gozo y abre el aula capitular.

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El P. Eysymont es conducido a Opole por el P. Ormienski
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Galitzia/El P. Eysymont es recibido con gran gozo y abre el aula capitular.
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Elección del Provincial y el Consejo
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El P. Eysymont es recibido con gran gozo y abre el aula capitular.

El P. Ormienski volvió a Opole alas 10 de la mañana, y dio a todos una gran alegría cuando les dijo que en breve llegaría el P. Eysymont. El P. Rector de Lukow envió sus caballos para facilitarle el camino al P. Ex Provincial. Por fin llenó de gozo y colmó las expectativas de todos el P. Ex Provincial con su feliz llegada a las dos de la tarde, y después de ser recibido efusivamente por todos, y descansar un rato, hizo intimar por medio del P. Segismundo Grymala, vocal de Lukow y maestro de ceremonias, la primera sesión, que debía empezar a las 5, para llevar a cabo en ella todo lo necesario según el derecho antes de la elección del Provincial. Entonces, después de dar la señal y estando reunidos todos los Padres en el aula capitular a la hora señalada, El P. Eysymont, ex Provincial, con un discurso breve y grave expresó su agradecimiento a los Padres reunidos, que en medio de tantos cambios, le habían propuesto antes como presidente del Capítulo, para que pudieran confirmarlo o designarlo como tal desde Roma. Luego por orden suya el P. Segismundo Grymala, maestro de ceremonias, leyó primero el decreto directorial de la Corte de Viena con respecto a la división de la Provincia y creación de una nueva. Luego leyó el decreto de la Congregación General erigiendo en Viceprovincia estos cinco colegios de Chelm, Cracovia, Lukow, Radom y la residencia de Opole. En tercer lugar leyó la carta enviada por el P. General al P. ex Provincial Eysymont, designándole Presidente de este primer Capítulo que iba a celebrarse en Galitzia Occidental, dándole la facultad para elegir Provincial en este Capítulo, y también para elegir los Superiores de las casas, el Consejo, para nombrar el Maestro de Novicios, y para determinar las casas para la primera y la segunda probación. Finalmente, para cortar todas controversias, leyó el decreto del Gobierno Supremo dando al P. Eysymont el derecho de presidir el Capítulo, según las leyes de la Orden. Se pasó luego a la legitimación de los PP. Superiores y vocales. Una vez terminada esta, el P. Rector de Cracovia propuso que dado el escaso número de electores, y la falta de una congregación provincial, los Padres que habían sido en el pasado rectores y superiores y vivían ahora en Opole fueran incorporados como miembros del Capítulo. La proposición agradó a todos, y se decidió a viva voz que el P. Nicolás Twardowski, que había sido antes superior de Radziejow, el P. Inocencio Ormienski, antes Rector de Lukow, y el P. Erasmo Sokolowski, antes Rector de Chelm, fueran invitados como miembros del Capítulo, teniendo su lugar después de los Rectores. Sin embargo decidieron cautamente que este privilegio se concediera a los ex Rectores sólo por esta vez, y que en el futuro no podrían solicitarlo. De este modo se completó el catálogo de los Padres Capitulares, que eran los siguientes:

  • Rvmo. P. Martin Eysymont, Ex Provincial, Presidente
  • Muy R. P. José Radecki, Rector de Chelm
  • Muy R. P. Segismundo Linowski, Rector de Cracovia
  • Muy R. P. Antonino Szychi, Rector de Lukow
  • Muy R. P. Lorenzo Cielecki, Superior de Radom
  • Muy R. P. Celestino Tymicyski, Superior de Opole
  • R. P. Samuel Chruscikowski, ex Rector y vocal de Chelm
  • R. P. Nicolás Twardowski, ex Superior de Radziejow
  • R. P. Inocencio Ormienski, ex Rector de Lukow
  • R. P. Erasmo Sokolowski, ex Rector de Chelm
  • R. P. Hilario Duscynski, vocal de Cracovia
  • R. P. Nicolás Mitkowski, vocal de Radom
  • R. P. Segismundo Grymala, vocal de Lukow.

Tras leer el catálogo, el Presidente dijo que al día siguiente, el de las elecciones, se celebraría una misa votiva al Espíritu Santo a las 9, y rogó insistentemente a los capitulares para que deliberaran cuidadosamente entre sí acerca de las personas a elegir, para que todo tuviera lugar en paz y concordia. Y levantó la sesión.

Notas