GinerMaestro/Cap07
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Capítulo 07: AL SERVICIO DEL CABILDO DE URGEL
Indudablemente, el medio año largo pasado al servicio de don Gaspar Juan de la Figuera había sido rico en experiencias. Para un joven inteligente como él, los meses de Monzón le permitieron asomarse al complicado mundo de la alta política, y aunque no estuviera particularmente interesado en ella, era inevitable —en una villa tan pequeña— captar ideas e intencionalidades; egoísmos e intereses nacionales, regionales, personales; subterfugios, intrigas, tejemanejes, trapicheos; contrastes entre prepotencias y servilismos… Todo un mundo de caracteres diversos y de problemas graves.
Pero como sacerdote —y más como futuro Fundador de una Orden religiosa— la oportunidad de participar, al menos como observador y testigo de excepción, en los dramáticos problemas que la reforma de agustinos y benedictinos habían originado, era una gracia impagable, y una escuela excepcional para la maduración de su personalidad.
Por añadidura, después de la fuerte experiencia en Montserrat, se le ofreció la ocasión providencial de retirarse durante casi un año a su pueblo natal, donde pudo rumiar sus recuerdos con serenidad y pensar en el futuro con optimismo.