GinerMaestro/Cap07/12

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07.12. 'Sede vacante'

Las preocupaciones del cabildo durante la sede vacante no se centraban tan sólo en la defensa de la ciudad episcopal contra los hugonotes y bandoleros, sino que tenían de mira, principalmente, la solicitud pastoral por toda la diócesis. Y esto le honra. Llevaban ya diez meses sin prelado y con pocas esperanzas de que se nombrara sucesor con relativa rapidez. Por tanto, sintiendo que la necesidad apremiaba, decidieron en la reunión capitular del 12 de octubre de 1587 girar visita pastoral a toda la diócesis.

Se hizo, pues, el reparto de los 17 arciprestazgos del modo siguiente: se nombró visitador del oficialato de Cerdaña al decano del cabildo, Pedro Pascual; el de Urgel, o Mayor, fue adjudicado a Pablo Boquet; a Rafael Gomis le dieron los de Tremp, Balaguer, Guissona, Agramunt, Sanahuja, Oliana y Pons; a Juan Besturs le tocaron los de Sort, Tirvia y Cardós; finalmente, a Francisco Roca le encomendaron los de Berga, Bagá, Cardona, Solsona y San Lorenzo. Por los trabajos y zozobras que suponía la visita, asignaron a los canónigos Gomis y Roca 50 libras a cada uno, pues tenían mayor número de oficialatos que visitar, y a los otros tres, Pascual, Boquet y Besturs, 30 libras a cada uno, pues —aclaraba Calasanz que escribió el acta— 'no tenían que visitar tanta ni tan mala tierra'.[Notas 1]

Lo que no sabía aún, mientras escribía esto, es que Gomis le elegiría a él como acompañante para recorrer 'tanta y tan mala tierra', entre la que estaba incluido su pueblo, Peralta de la Sal, perteneciente al oficialato de Balaguer.

Merece la pena resaltar las recomendaciones que el cabildo daba a los visitadores: no deben tomar ni pedir componenda alguna ni regalos, salvo que fueran estos de poca monta, se les ruega encarecidamente que visiten las iglesias y a quienes las rigen, con la rectitud que necesitan; finalmente les dicen que 'si durante la visita robaran algo a los visitadores, el cabildo les resarcirá de lo robado, pero vayan en todo lo que lleven con moderación y sin fausto'.[Notas 2] Después de lo dicho sobre el bandolerismo, no puede extrañarnos esta referencia a posibles robos y despojos de atracadores y bandidos. Más todavía, nos causa profunda admiración el pensar que de las diez cartas desesperadas que mandó Calasanz al virrey de Cataluña pidiendo auxilio contra los bandoleros, nada menos que nueve fueron escritas antes de emprender esta visita, y de ellas las dos últimas en el mes de octubre, días antes de salir de Urgel.

Tales visitas, pues, se convertían en verdaderas aventuras por aquellas escarpadas montañas, por caminos pedregosos e imposibles, por desfiladeros pavorosos, por barrancas y torrenteras inhóspitas; con la angustia de topar en aquellas soledades, en cualquier recodo del camino, con una cuadrilla de salteadores. Más de una vez evocarían aquella página de la carta de San Pablo a los Corintios, en el viejo latín de la Vulgata: 'in laboribus plurimis… in itineribus saepe: periculis fluminum, periculis latronum… periculis in solitudine. . .' (2 Cor 11,23-27).

La decisión capitular se llevó a cabo inmediatamente. Se tomó el 12 de octubre, y el 25 de noviembre, al reunirse de nuevo el cabildo, se había ya realizado.[Notas 3] Janer anotó escrupulosamente los días de ausencia de Calasanz en su casa para descontarle la pensión, y dijo que habían sido exactamente 39 días de visita.[Notas 4] En este largo y pesado viaje, Calasanz hizo de secretario del visitador, y de ello han quedado —hasta ahora— dos cartas escritas por él y firmadas por el canónigo Rafael Gomis. La primera está fechada en Tremp, el día 26 de octubre, y se pide al cabildo que mande respuesta a Balaguer, donde efectivamente se firma el segundo documento el día 8 de noviembre.

No deja de tener su interés la cuestión que el visitador consulta al cabildo, referente a la iglesia de Tremp, de la que sería nombrado oficial eclesiástico año y medio más tarde (1 de julio de 1589) el entonces secretario de la visita, Calasanz. Dice la carta: 'he hallado que en la definición de los testamentos el Oficial [eclesiástico] y el notario se reparten a partes iguales el derecho de los legados píos que son de valor inferior a cien libras y dicen que esto es cosa antigua y que el notario tiene arrendadas las escribanías con esos pactos del sr. canónigo Barthomeu o de los arrendadores'.[Notas 5] ¿Qué respuesta dio el cabildo? ¿Gozó también de esos repartos Calasanz, cuando fue luego oficial eclesiástico de Tremp?

Por el documento firmado en Balaguer el 8 de noviembre, sabemos que cinco días antes, el día 3, visitador y secretario estaban en Peralta de la Sal, donde el párroco don José Texidor y beneficiados les presentaron una súplica de reducción de misas fundadas, que eran muchas (2.743), con un estipendio mísero de un sueldo por misa. Lo mismo hizo el párroco de Gabasa, apelando ambos a la pobreza de las parroquias.[Notas 6] Calasanz era testimonio fidedigno del estado real del clero de su pueblo y de Gabasa, por lo que el visitador, consciente de la pobreza de ambas parroquias, concedió la reducción elevando el estipendio a un real (dos sueldos).[Notas 7]

La visita a Peralta nos cerciora de que además de las siete cabezas de arciprestazgo, pasaron también por otros pueblos, y lo mismo se desprende de la carta escrita en Tremp, en que dice el visitador: 'Hoy he visitado la iglesia de Tremp y he encontrado gran satisfacción tanto por la Comunidad [del clero] como por el Pueblo, y así pienso que en lo demás del Oficialato habrá poca dificultad'.[Notas 8] No obstante, no pudieron recorrer todas las parroquias, pues 39 días no daban para tanto. Indudablemente para el joven sacerdote José Calasanz debió de ser una experiencia maravillosa. Por primera vez salía del ámbito cerrado de las curias episcopales y se ponía en contacto directo con la vida real de las parroquias, con la pobreza y simplicidad del clero rural y con la miseria de tanta gente del pueblo.

Notas

  1. Cf. íntegra el acta en ‘Liber conclusionum’, f.154v (cit. en P. PUJOL I TUBAU, ‘Noves dades’, n.50).
  2. Ib.
  3. Cf. ‘Liber conclusionum’, f.155.
  4. Cf. P. PUJOL I TUBAU, o.c., p.17.
  5. Ib., n.51 (texto íntegro de la carta).
  6. El de Peralta escribía: 'Son tan exigues y tenues les distribucions e ganancies de la Parrochial de Peralta per ser la charitat ayxi de les mises fundades com de les de devoció tant poca…'; y el de Gabasa: 'atenent al numero de les misses a les quals dient las araho de sou no pot bastar y a la tenuidad e pobresa de la Retoría...' (texto original en la sala de reliquias de la Casa Natalicia de Calasanz, en Peralta. Editada en EcoCen 5 [1946] 7-8).
  7. '… cum nobis legitime constet de paupertate benefficiatorum communitatis Peraltae ac Rectoris Gavassae… ad rationem unius regalis pro qualibet missa reducimus ita quod ex duabus missis pro charitate unum solidum tantum habentibus unam tantum missam celebrare teneantur…' (ib.). Los títulos que ostenta el Visitador son: 'Nos Raphael Gomis Archidiaconus maior (o sea, Arcipreste de Seo de Urgel) et canonicus Stae Ecclesiae Urgellen. ac pro Illii, et admod. Rdo Capitulo Administratore mensae episcopalis sede Pastore carenti, in spiritualibus et temporalibus Vicarius Generalis et Visitator...' (ib.).
  8. Cf. P. PUJOL I TUBAU, ‘Noves dades’, n.51.