GinerMaestro/Cap09/07

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09.07. Los frutos de la renuncia a las plebanías de Ortoneda y Claverol

Don Francisco Motes declaró en su carta del 11 de diciembre de 1648 que el Dr. Calasanz 'dejó la plebanía y parroquial de Claverol al Sr. Jaime Segur de Vilamitjana con un personado de 17 escudos y medio a disposición de dicho Sr. Calasanz, y habiendo de servir para obras pías lo aplicó para los pobres de su parroquia, sin atender a carne y sangre, y así en dos fiestas principales del año, esto es, en la Pascua y en Pentecostés se dio la limosna, según lo dispuesto'.[Notas 1] Hubo, pues, dos actos jurídicos distintos: la permuta de las plebanías por el personado y la institución o fundación de una obra pía en favor de los pobres de Ortoneda y Claverol. Y ambas cosas han quedado hasta hoy suficientemente documentadas.

En efecto, en fecha desconocida, don Bernardo Rosell, plébano de Ortoneda y Claverol, sacó copia del instrumento original latino de la fundación de la obra pía, en el que se alude expresamente al instrumento anterior de la permuta.[Notas 2] Esta última fue firmada el 6 de septiembre de 1591 ante el notario de Tremp, Luis Vidal, del que tantas veces se sirvió Calasanz, y en ella estipulaba la cesión de las plebanías de Ortoneda y Claverol por parte de Calasanz a cambio de un personado, instituido por don Jaime Segur, pbro. de Vilamitjana,[Notas 3] y avalado por su hermano Juan Segur, cuya renta o pensionado anual sería de 17 libras y media. En otras palabras, Calasanz permutaba dichas plebanías por un censal perpetuo de 240 libras,[Notas 4] a cargo de los hermanos Segur, que producía una, pensión anual de 17 libras y media.

En un segundo tiempo, y ante el notario Gaspar Múa, instituyó Calasanz una fundación con los frutos del mencionado censal, a modo de testamento, es decir, que él recibiría durante su vida esa pensión y después de su muerte sería aplicada a los fines caritativos indicados en la fundación, es decir, para ayudar a los pobres de los dos pueblos de Ortoneda y Claverol.[Notas 5] Y consistiría en que, al tiempo de la siega, los administradores de la causa pía gastarían 15 libras comprando trigo y lo guardarían;[Notas 6] ocho días antes de la Pascua distribuirían gratis la mitad de ese trigo entre los pobres de ambas plebanías, y la otra mitad, igualmente, ocho días antes de Pentecostés. Nombraba administradores a los párrocos de Pobla de Segur y de Ortoneda y Claverol, que cobrarían sendas libras anuales por su tarea administrativa. Exigía también que cada año el Oficial eclesiástico de Tremp o el Visitador del Oficialato revisaran el libro de cuentas, donde debía constar la cantidad de trigo comprada, junto con los nombres de los pobres atendidos y la porción dada a cada uno. El revisor del libro cobraría también por su trabajo diez sueldos, que con los demás gastos sumaban exactamente 17 libras y media.[Notas 7]

La idea caritativa de asistir a los necesitados no con dinero, sino con trigo, la vimos ya aplicada por el obispo de Barbastro, que lo justificaba diciendo que era más fácil repartir trigo que dinero, pues 'si las rentas estuviesen en dinero no sé si se repartirían con esta liberalidad'.[Notas 8] El trigo era realmente la base de la alimentación, y por tanto su abastecimiento una de las preocupaciones fundamentales de las ciudades y los pueblos, particularmente con respecto a los pobres. En la ‘Crónica de Talarn’ se lee a este propósito: “Año 1594. Año de mala cosecha. Había costumbre en Talarn de que el Consejo de la Villa nombrase dos camareros todos los años, quienes cuidaban de comprar de los fondos del común todo el trigo necesario para el consumo del año vendiéndolo a los pobres y administrándolo en beneficio de la Villa…”.[Notas 9]

Por otra parte, era frecuente que los bien acomodados se acordaran de los pobres en sus testamentos, dejándoles no sólo mandas para ser repartidas una sola vez, sino también mediante censales cuyos frutos —pocos o muchos— fueran distribuidos cada año, como hizo Calasanz.[Notas 10]

Dijo bien don Francisco Motes que Calasanz destinó aquel ‘personado’ 'Para los pobres de su parroquia, sin atender a carne y sangre'. Hubiera podido dejarlo en legado a sus parientes, como hacían otros.[Notas 11] Era, sin duda, un gesto de caridad para con los pobres, pero… no suponía ningún acto de desprendimiento personal, pues mientras él viviera cobraría aquella pensión, y de hecho así fue hasta que por razón de su voto de pobreza iba a quedar incapacitado para poseer bienes propios, y entonces él mismo escribió a sus amigos, los Motes de Pont de Claverol, con fecha del 8 de septiembre de 1617, para decirles:

'Quando yo me fui de Tremp dejé encomendado en el Archivo de los Oficiales un instrumento público hecho por Gaspar Mua notario y un libro para que muriendo yo se entregase a V.m., en que se ordena que cada año cobren de la casa de Mn. Segur, de Vilamitjana, 17 (libras), 10 sueldos para comprar tanto trigo y repartirlo entre los pobres de Claverol y Ortoneda, y porque yo no puedo tener más dicha renta, quiero que luego se emplee en esa obra pía…'.[Notas 12]

Ciertamente, desde que instituyó sus Escuelas Pías en Roma, la renta de su personado la dedicó a sufragar sus muchos gastos. Y no faltaron complicaciones por la ineficacia de sus procuradores españoles que no siempre le hacían llegar a tiempo las pensiones.[Notas 13] Pero más complicaciones hubo desde 1617, en que debería haber empezado a funcionar la causa pía, de modo que el 20 de enero de 1620 escribió al Plébano de Claverol una carta en catalán, insistiendo de nuevo y declarando con acta notarial que por su voto de pobreza no podía ya percibir rentas y que debían repartirlas, con los atrasos, según las cláusulas de la fundación.[Notas 14] Parece ser, sin embargo, que no empezó a cumplirse su deseo hasta después de su muerte.[Notas 15]

En 1740, don Manuel de Motes, Plébano de Claverol, aseguraba que 'la sobredicha obra Pía dispuesta por el Vble. Patriarca [Calasanz] en la expresada su carta [del 8-9-1617] tuvo tal efecto que hasta ahora se ha continuado sin la menor discrepación su observancia apellidándola en este lugar de Claverol la Causa Pía de Calasanz…'.[Notas 16] Y en 1906 escribía Coy y Cotonat: “La última distribución la hizo el párroco de Pobla de Segur, don José Ballarín, ecónomo, y ejerciendo igual cargo en Claverol don Ignacio Vilanova, en el año 1833… Desde dicha fecha ya no hay más memoria de dicha fundación...”.[Notas 17]

Notas

  1. Cf. BAU, BC,p.174, cotejado con el original (RegCal 13, 1.1.).
  2. Publicado por L. Picanyol en EphCal 5 (1932) 200-201. De él se conserva el original de Rossell y dos copias más en RegCal 13, 6-7.
  3. Don Manuel Motes, Plébano de Ortoneda y Claverol, revisando en 1740 los libros parroquiales observaba que el 16 y 20 de febrero de 1588 tuvo dos bautizos el Plébano Antonio Berenguer, antecesor de Calasanz, y desde esos días 'no encuentro que Plebán alguno bautizase sino vicarios hasta que entró a ser Plebán Jaime Segur Presbo. de la Villa de Villamediana [Vilamitjana] el cual en 10 de diciembre de 1591 bautizó a uno como Plebán' (J. POCH, ‘Un documento inédito sobre San José de Calasanz’: Argensola 42 [1960] 105).
  4. Como censal lo define don Manuel Motes en su declaración citada en la nota anterior: '… en fuerza de dos autos que se firmaron de censal…' (ib., p.107); en un documento notarial de 1604, en que Calasanz nombra procuradores de su 'obra pía', se lee: 'omnes et singulos fructus decursos et in futurum decurrendos census ad favorem dicti Domini [Calasanz]…' (EphCal 6 [1959] 224-225). El censal era un documento similar a un depósito bancario, en el que constaba que cierta persona había prestado a otra una cantidad de dinero por tiempo determinado o indeterminado, con la carga de que le pagara una pensión o interés anual.
  5. 'Ego Josephus Calasans olim Plebanus de Ortoneda, postmodum vero Personatum obtinens permutatione mediante cum ipsa Plebania et Personatu facta inter me et D. Jacobum Segur Presbyterum de Villa Meana (sic) dimitto, et consigno post obitum meum totam illam annuam pensionem 17 librarum et 10 solidorum, quam quolibet anno tenetur persolvere ratione dicti Personatus praedictus D. Jacobus Segur principalis, et frater eius Joannes Segur, ut fideiiussor, Instrumento mediante in posse discreti Ludovici Vidal Notarii Villae Trempi die 6 septembris 1591 recepto et testificato, pro subveniendis Pauperibus in oppido de Ortoneda et Claverol habitantibus…' (ib., p.200). En esta copia, debida a don Bernardo Rossell, no se alude al notario Gaspar Mua, que avala la fundación, pero lo testifica Calasanz en una carta del 8 de septiembre de 1617, dirigida a los Motes (cf. c.16).
  6. En los años 1587-1590, una carga de trigo costaba en Urgel en torno a 3 libras (cf. P. PUJOL I TUBAU, ‘Ob. Comp’., p.537).
  7. Cf. EphCal 5 (1932) 200-201.
  8. Cf. cap. 6, n.5 de esta obra.
  9. Cit. en J. POCH, ‘San José de Calasanz, Oficial eclesidstico…’, p.304.
  10. El 25 de agosto de 1546 Juan Calasanz, supuesto hermano del padre del Santo, dispuso en su testamento: 'ltem quiero, ordeno y mando que de mis bienes se funden diez sueldos jaqueses de renta perpetua… para que aquellos se distribuyan y repartan en pobres puramente necessitados en cada un año en la villa de Benabarre… para lo qual por mis executores infrascriptos se tomen de mi hazienda 200 sueldos jaqueses' (J. LÓPEZ NAVÍO, ‘Testamento de Micer Juan Calasanz’, p.20). Mayor es la generosidad de José de Calasanz, que instituye una renta anual de 17 libras y media, mientras este Micer Juan deja sólo media libra.
  11. Recuérdese, por ejemplo, al fundador del Santo Hospital del Tremp, que instituye una 'causa pía' con una renta anual de 100 libras 'para las doncellas casaderas de su linaje o parentela' (cf. n.55 del c.8).
  12. C.16. Los votos simples los emitió al año siguiente (19 de marzo de 1618), pero expresamente quería que se empezara a aplicar a la obra pía la renta de 1617.
  13. Véanse los diversos cambios de tales procuradores, ante los notarios romanos Panizza y Betti, en los años 1599-1609, en G. SÁNTHA, ‘Quinque instrumenta…’ EphCal 6 (1959) 219-226. Y una deuda atrasada de cinco años, reconocida en 1610 por el canónigo Segur: 'Deu lo señor Canonge Seguer (sic) della Villa de Tremp a la Rda. Comunidad de Peralta 87 lliures 10 sous per lo de ms. Calasans...' (cf. J. POCH, ‘Tres testamentos…’, p.475, n.33 ter).
  14. C.45.
  15. Cf. EGC II, p.68.
  16. Cf. J. POCH, ‘Un documento inédito...’, p.107.
  17. A. Co y COTONAT, o.c., p.350. Además de esta fundación, hablaron también los biógrafos de otra distinta para dotar a muchachas pobres casaderas (cf. ‘Breve Notizia’: BAU, BV, p.12, y lo dicho en el cap. 8, n°. 5 y n.55 de esta obra). En una carta de Alacchi a Calasanz, fechada en Guissona el 2 de mayo de 1638, le dice: 'Mi hanno detto che il lascito fece sua paternitá di vestir si tanti orfani ogni anno...' (EHI I, p.40). Ninguna de esas dos obras pías han sido avaladas por ulteriores testimonios documentales. No se pueden, por ello, negar absolutamente, pero lo más probable es que fueran supuestas ampliaciones de la tan variadamente comprobada 'obra pía' del trigo para los pobres, como supone Sántha respecto a la aludida por Alacchi (cf. ib., n.19).