HB23B/Historia de la Casa de Nikolsburg

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Nikolsburg (fundada en 1631)
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Historia de la Casa de Nikolsburg

(Arch. Gen., Reg. Prov 53 B) [Notas 1]

De qué modo, cuándo, para qué y por quién fueron llamados y admitidos nuestros Padres a Nikolsburg

Después que el Rvdmo. D. Juan Bautista Gramay, Prelado de Arnheim, nombrado arzobispo de Upsala, consejero y limosnero de S. Ces. Majestad (al cual además el Emmo. y Excmo. Príncipe Francisco de Dietrichstein, Cardenal S.R.I. y Obispo de Olomuc le había encargado la dirección de las escuelas que enseñaban en este lugar, en parte con maestros seglares y en parte eclesiásticos, así como el cuidado del Seminario Lauretano fundado en el año 1625 por el citado Eminentísimo Cardenal en su ciudad de Nikolsburg para promover el culto de la Santísima Virgen en esa ciudad) enviase muchas cartas en nombre del citado Eminentísimo a nuestro padre General y Fundador de la Orden, José de la Madre de Dios, para introducir a los Padres de las Escuelas Pías en la ciudad citada, esperando que nuestra Orden podría conseguir muchos frutos, especialmente mediante la educación de los hijos de Padres luteranos, respondió a las peticiones del Cardenal afirmativamente, y con este fin el 2 de abril de 1631 envió de Roma los siguientes religiosos: los PP. Peregrino de S. Francisco, Superior local; Ambrosio de Sta. María, Antonio del Smo. Sacramento y además un clérigo, dos operarios profesos y dos clérigos novicios.

Dichos religiosos llegaron a Nikolsburg el 2 de junio del mismo año, y como entonces el Eminentísimo Cardenal estaba en la ciudad real de Brno en Moravia, fueron a presentarse al Eminentísimo, quien se alegró mucho de su venida. Entonces el Prelado citado asignó de momento a los Padres como residencia en Nikolsburg un lugar cercano al Seminario Lauretano, el hospital con la iglesia de S. Juan Bautista.

Abren las escuelas y aumenta el número de religiosos

El 20 del mismo mes y año se abrieron las Escuelas Pías de Nikolsburg para educar a la juventud conforme a nuestro instituto. Como inmediatamente después vino un gran número de alumnos, tanto de la ciudad como de otros lugares, se pensó en aumentar el número de obreros en las escuelas, pero a causa de la dificultad de la lengua germana y lo complicado de enviarlos desde Italia por la dureza del viaje, se consideró que, para que los alumnos pudieran aprovechar, era necesario que los maestros fuesen religiosos que hablasen el idioma patrio. Con esta finalidad el P. General envió desde Italia al P. Juan Bautista de Santa Tecla como Maestro de Novicios, y estableció el noviciado primero en Nikolsburg, y luego lo trasladó a nuestra casa de Straznice, como se lee en los anales de aquella casa.

Se comienza la construcción del colegio y se crea la Fundación para los Padres

Mientras tanto el Eminentísimo Príncipe y Fundador, viendo la estrechez e incomodidad del lugar en el que hasta entonces vivían nuestros Padres, decidió construir un edificio nuevo, cosa que comenzó en 1632, asignando un terreno muy amplio. Aunque viviendo él sólo terminó una parte del cuadrado, en los tiempos sucesivos se completó todo el cuadrado con dos pisos, y actualmente sirve como residencia cómoda para muchos religiosos. De qué manera fue creciendo en el tiempo, se hará ver en su momento; ahora trataremos del fondo que el Fundador estableció generosamente para sustento de los Padres.

En el mismo año 1632 el Eminentísimo Cardenal nos entregó el cuidado del Seminario lauretano que había fundado y hasta ahora había estado bajo la jurisdicción del supradicho Rvmo. Sr. Prelado, con todos los fondos que le correspondían, y además los que correspondían al hospital del que habían expulsado a los anabaptistas en otro tiempo, así como la administración de los fondos que de momento quedaron bajo el control del Rvmo. Sr. Prelado, y que nos fueron entregados en los años sucesivos, como se dice más abajo. Añadió además el Eminentísimo 1000 FR anuales para nuestro sustento, y para los 9 niños lauretanos con su preceptor, 400 FR.

Luego en el año 1637, que fue el siguiente al de la muerte del Eminentísimo Cardenal de piadosa memoria, su sucesor en el gobierno y patrón, el Excelso Príncipe Maximiliano de Dietrichstein, nos confió por completo el Seminario citado, nos entregó totalmente la administración de los fondos y eximió a los niños lauretanos de todo servicio al que estaban obligados antes en la iglesia colegiata de Nikolsburg.

En el año 1658, tras fallecer el Príncipe Maximiliano, su heredero Fernando nos dejó una propiedad suya vecina a nuestro colegio, mediante un acuerdo según el cual le cedimos otra que gozábamos hasta entonces más distante de nuestra casa. De este modo podíamos ahora vigilar más de cerca y cómodamente su funcionamiento.

Progreso de la construcción y crecimiento del Seminario

En aquel tiempo se acabó de construir el cuadrado que forma nuestro colegio, aunque aparte de aquella parte que se construyó aún en vida de nuestro eminentísimo Fundador, no encontramos por escrito quién hizo las demás. Era muy necesario entonces construir de modo mejor el templo que nos había entregado el Eminentísimo Cardenal, pues era pequeño, hondo y húmedo.

Construcción del nuevo templo

Así pues, en el año 1666, después de demoler la mayor parte de las paredes antiguas, se comenzó a construir el nuevo, y en el espacio de 6 años, en parte a nuestras expensas, y en parte con dones piadosos, fue terminado, de modo que puede recibir más gente y de manera más cómoda.

Erección de una Cofradía bajo el título de los Fieles Difuntos

Para promover el culto de Dios y librar las almas del fuego del purgatorio ofreciéndoles el consuelo de la liberación, el mismo año en que se terminó la construcción del templo nuevo, es decir, 1672, se erigió una cofradía con el título de los Fieles Difuntos, que en los primeros años tuvo controversias sobre derechos y precedencia con otra cofradía erigida en la iglesia colegiata con el título de Santísimo Cuerpo de Cristo, hasta que poco después una y otra establecieron un acuerdo pacíficamente.

Construcción del nuevo Seminario y biblioteca

Mientras tanto el edificio del antiguo Seminario, como amenazaba ruina y además parecía un lugar menos cómodo, fue demolido y los alumnos fueron trasladados a otra vivienda. Así pues, en aquel año 1672 una parte del colegio ya terminada fue destinada para habitación más cómoda de los niños del Seminario Lauretano. Luego en el año 1688 se construyó encima el segundo piso, y aquella parte fue dedicada a biblioteca doméstica, de la que hablaremos más tarde.

Se cierra la escuela a causa de los disturbios bélicos

En el año 1683, cuando el ejército turco sitiaba Viena de Austria y mientras tanto los tártaros depredaban una buena parte de la Austria inferior, y los rebeldes húngaros de Tököly hacían lo mismo con el ducado de Moravia, nuestros Padres se vieron obligados a cerrar la escuela, y a ir a refugiarse algunos a Bohemia, y otros a la Moravia Ulterior.

El P. Provincial saluda al Rey de Polonia

El P. Provincial Ambrosio de Sta. Ludmilla, después de salvar la biblioteca en la fortaleza de Nikolsburg, los archivos en Litomysl, y de enviar otras cosas de valor al templo de Brno, después de algunos días volvió a Nikolsburg, donde se encontraba el Rey de Polonia Juan, con su ejército, que iba a socorrer a Viena sitiada, y le saludó con unas breves palabras, que agradaron mucho al Rey, por lo cual estuvo después hablando afablemente con él durante media hora, y se encomendó con su ejército a las oraciones de nuestros Padres.

Se construyen las escuelas nuevas y el profesorio para nuestros religiosos

Con el paso del tiempo también las escuelas antiguas se quedaron pequeñas, por lo que se pensó en demolerlas y construir otras nuevas. Para tener más espacio, en el año 1694 se construyó por completo la parte de las escuelas en la parte que faltaba para completar el cuadrado. No fue porque había tanto número de jóvenes seglares que vinieran a las escuelas, sino porque de este modo podría aumentar el número de nuestros profesos en esa casa. Así la parte superior del edificio que había quedado vacante se convirtió en lo que llamamos “profesorio”, como le llamamos, donde continuamente se ilustraban en la ciencia.

Se erige otra cofradía

En el mismo año se creó otra cofradía de los alumnos de nuestras escuelas de latín, con el título de Santo Nombre de María. En el año 1696, durante la visita de nuestro P. General Juan Francisco de S. Pedro a Germania le concedió la gracia de que todos sus miembros participarían de todos los méritos propios de las obras de la Orden.

Un legado para la Biblioteca

En el año 1698 nuestra biblioteca recibió un legado de D. Daniel Braunhofer, Prefecto de los caballos del Excmo. Sr. Príncipe Fernando de Dietrichstein y padre de nuestro religioso el P. Inocencio de S. Clemente, con un capital de 1000 FR, con cuyo interés anual se comprarían libros.

Construcción en nuestro terreno

En estos últimos años se realizó una obra que desde tiempos antiguos se decía que había que hacer en unas ruinas que había en nuestro terreno. Y así el año 1731 se derribó un edificio ruinoso que estaba en el mismo lugar en el que hay hoy un edificio oblongo, que sirve de granero, de vivienda para seglares y para otros fines.

Finalmente, como nuestras habitaciones cuando llegaron por primera vez los Padres a Germania, según la norma de la primera pobreza eran pequeñas y sin hogar en estas regiones frígidas, se vio conveniente reformarlas tal como son las que se edificaron luego, y como su número disminuyó considerablemente, en una parte del colegio se construyó una tercera planta, en el año 1737.

Notas

  1. Incluimos solamente los documentos de interés correspondientes a esta época y que no están incluidos en el libro “Hist. Bibl. 23”.