Madrid (ES) Colegio Calasancio y residencia de religiosos

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Mapa de la demarcación
Imagen del Divino Cautivo venerado en el colegio Calasancio, en otro tiempo cárcel
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Este texto es el original publicado en su día en el DENES. No se ha hecho sobre él ninguna rectificación. Su contenido, pues, puede no reflejar la realidad actual

Datos

Demarcación Castilla

(1922- )

Antecedentes históricos.

Deseaba la Provincia a comienzos de siglo un colegio en la capital que gozara de todos los adelantos de la pedagogía. Existían ofrecimientos del colegio del «Pilar», se habían tanteado terrenos en los «Altos del hipódromo»; pero sólo comenzó a concretarse la intención cuando el colegio de «San Antón» adquiere unas parcelas de casi catorce mil quinientos metros cuadrados entre las calles de Lista, Pardiñas, Padilla y Torrijos en 1916. El P. Clemente Martínez, en su provincialato, logra que el colegio de «San Antón» se desprenda generosamente de los terrenos adquiridos en favor de la Provincia. Encarga los planos al arquitecto D. Jesús Carrasco (quien había levantado en Madrid edificios como la iglesia de la Concepción en la calle Goya, o como el edificio París-Madrid para grandes almacenes en la Gran Vía) quien diseña un grandioso colegio, que nunca se llegó a concluir. Pronto lograron las licencias y el primer cuerpo del edificio se inauguraba en 1922 con una comunidad de doce religiosos.

Desarrollo histórico y pedagógico.

Al iniciarse el curso se totalizaban unos 700 alumnos de una amplia gama social. Año tras año se completaba el centro con mobiliario escolar, gabinetes, biblioteca y la segunda fase del vasto complejo (el ala de la calle Padilla con vuelta a Torrijos). A los catorce años había crecido: eran 40 los religiosos, 1.497 los alumnos, de los cuales 100 internos, 77 mediopensionistas, 604 vigilados, 288 semiexternos y 428 enteramente gratuitos. La guerra civil española truncó la realidad mediante el incendio de parte del edificio y del mobiliario escolar, la muerte violenta de varios religiosos y el haberlo convertido en cárcel hasta 1944 los dos bandos en contienda. Para continuar la labor educativa hubo que alquilar dos hoteles del duque de

Seo de Urgel, en la confluencia de las calles Velázquez con Diego de León. Una vez devuelto el edificio primitivo, el arquitecto Sr. Laguna Serrano se encargó de reparar los cuantiosos desperfectos y de adecuarlo a las nuevas exigencias de los tiempos. En el rectorado del P. Francisco Toral (1943-1946) se funda la cofradía del Divino Cautivo en memoria de lo sucedido entre los presos de guerra; su imagen es una impresionante obra de Mariano Benlliure; y cofradía e imagen han dado firma a la Semana Santa de Madrid. También se inauguró la capilla con bellas imágenes de San José de Calasanz y de la Virgen de las Escuelas Pías.

En los años siguientes se cimentó y proyectó la labor educativa del colegio. La congregación mariana calasancia llegó a contar con más de 200 congregantes, la asociación de antiguos alumnos fue renovada y potenciada, se levantó el nuevo pabellón con capilla, dormitorios y dependencias anejas, apto para albergar a 216 internos, inaugurado por el P. General Vicente Tomek. También en la década de los cincuenta hubo que despejar la amenaza del cierre definitivo de los campos deportivos mediante la construcción de un edificio habilitado para centro comercial entre las calles Peñalver y Ortega y Gasset. También se construyó un nuevo pabellón para la comunidad, que cierra el patio interior, presidido por la estatua de piedra de Calasanz. Finalmente se preparó el complejo deportivo; los festivales del deporte, bajo la dirección de D. José Luis Torres, llamaron siempre la atención.

De los muchos alumnos que han pisado sus aulas algunos han sobresalido en la vida política, científica o cultural, aunque no todos ellos guarden igual recuerdo del colegio; entre ellos se pueden enumerar a los hijos del presidente de la República Alcalá Zamora, a los doctores oftalmólogos García Franco, a los hermanos Hernando Galiano político y catedráticos, a Federico Sopeña, a José Bódalo y a Camilo José Cela.

Residencia calasancia.

En 1975, al ir suprimiendo los internados, se acomoda una parte del existente en el colegio para residencia de religiosos de edad avanzada. Constituye el grupo una comunidad independiente de la colegial y posee todas las dependencias necesarias y requeridas para mejor atención de los ancianos. El 1-12-1975 fue inaugurada por el P. Provincial. El primer grupo estuvo compuesto por catorce religiosos, quienes incluso atienden a ciertos servicios religiosos y pastorales del colegio y de otras comunidades o fundaciones caritativas cercanas. Los rectores de esta comunidad fueron los PP. Pedro Turiel (1975-1976) y Miguel García (1976- ).

Superiores

Persona Año
Gervasio Jáimez 1925
Rogelio Gutiérrez 1928
David Álvarez 1931
Gervasio Jáimez 1934
Gervasio Jáimez 1939
Francisco Toral 1943
Gregorio Peña 1946
Marino Gayar 1949
Aurelio Isla 1961
Pedro García 1964
Juan José Aja 1967
José Aldegunde 1968
Miguel García 1970
Ángel Nevado 1973
Bernabé Ruiz 1976
Marino Gayar 1979
Eusebio Sáinz 1981
Pedro Ruiz 1982

Bibliografía

  • Núñez Merayo, A.: Breve historia del colegio Calasancio de Nuestra Señora de las Escuelas Pías ms. Madrid, 1978
  • Archivo Castilla carp 83-84
  • Archivo de la casa.

Redactor(es)

  • Anselmo del Álamo, en 1990, artículo original del DENES I