Plantilla:Textos de Calasanz del 10 de enero

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  • En cuanto a la ya larga indisposición de Vuestra Reverencia (citaremos así: V.R.), todos debemos recibirla de la mano del Señor, quien nos mortifica cuándo y cómo quiere, y todo para nuestro bien
(Año: 1636; Nº: 2494*; Destinatario: MORELLI, Angelo; Destino: Nápoles)
  • V. R. me escribe que el edificio está muy adelantado, refiriéndose al material, pero si el espiritual de la santa observancia y unión no va bien, el material nos servirá de poco. Y sobre este particular, toda la importancia está en la cabeza, de tal modo que si las cosas van bien, el honor y el mérito son de la cabeza, y por el contrario si las cosas no van bien el deshonor y perjuicio ante Dios son de la cabeza. Así pues, vea cuánta paciencia, cuánta caridad debe tener quien está al frente de una de nuestras casas. En esta materia el que cree saber menos, sabe más y el que cree saber más, sabe menos; porque Dios ayuda a los humildes y a los que sólo confían en él y no en sus fuerzas
(Año: 1637; Nº: 2660; Destinatario: ALACCHI, Melchiorre; Destino: Palermo)
  • Me gustaría que V. R. se comportara de tal manera, que nadie pudiera acusarle con razón de parcialidad o de negligencia, como conviene a un Superior; V. R. debe amar y favorecer a cualquier religioso que sea observante, aunque no sea del país, y hay algunos tan apegados en perjuicio de sus almas, que les parece que no están tranquilos sino en su propia patria, lo cual es un gran defecto para los religiosos, que cuanto más lejos están de sus parientes y de su patria tanto más suelen confiar en el auxilio de Dios, que no falta nunca a quien le es fiel dondequiera que esté. Y digo esto, porque habiendo querido cambiar a algunos de ese lugar, han preferido dejar la Religión antes que la propia patria, como ha ocurrido a muchos, y creo que ocurriría a otros si yo quisiera obligarles a salir de ese lugar, siendo esto un engaño muy grande y craso, pues nuestra verdadera patria es el paraíso, y en esta vida somos todos peregrinos; el religioso debe despojarse de todo para caminar más ligero por el camino del paraíso, que es nuestra patria. Y V. R. debería enseñar esta verdad a todos sus súbditos
(Año: 1642; Nº: 3869; Destinatario: TRABUCCO, Francesco; Destino: Nápoles)
  • Aquí esperamos algo a favor de nuestro Instituto, habiendo pasado el P. Esteban de los Angeles a la otra vida ayer a las 19 y esta tarde a las 23 se ha enterrado en nuestra iglesia de S. Pantaleón, al cual tanto durante su enfermedad cuanto después de su muerte todos nuestros Padres le han mostrado particular caridad y benevolencia con mucha satisfacción de sus parientes y amigos. V. R. no deje de hacerle ahí los sufragios y avise a las demás casas para que hagan lo mismo
(Año: 1648; Nº: 4522; Destinatario: GRIEN, Pietro Paolo; Destino: Nikolsburg)