Plantilla:Textos de Calasanz del 7 de septiembre

De WikiPía
Saltar a: navegación, buscar
  • Procure tener cuidado con la convalecencia del P. Domingo e igualmente con su propia salud, pidiéndosela siempre al Señor, el cual se la dará, o al menos paciencia con gran mérito para soportarlo todo por su amor, en el que todos debemos avanzar cada día más, para corresponder a lo mucho que él padeció por nosotros. Yo desde el año pasado siento fastidio en un costado y desde hace pocos días en los dos, pero no por ello ha disminuido mi ánimo de servir y padecer por su amor cuanto se me presente, sobre todo en utilidad de nuestro Instituto que es la educación y reforma de los muchachos
(Año: 1624; Nº: 0247; Destinatario: CANANEA, Gio. Pietro; Destino: Narni)
  • Le exhorto a la paciencia con la que se perfeccionan las obras, y si bien el enemigo del género humano procura impedir las obras buenas, nosotros no obstante debemos procurar promoverlas y superar todas las dificultades con la paciencia
(Año: 1630; Nº: 1484; Destinatario: Falco, Ángelica di; Destino: Nápoles)
  • Me gustaría que hiciese hacer oración a los escolares en la iglesia, mañana y tarde, de ocho a diez por vez, encomendando al Señor algunos negocios graves de la Religión, y si tienen el Santísimo Sacramento, tener abierta la puerta del tabernáculo con algunas luces, y cuando no exista semejante comodidad, háganlo en la iglesia como de ordinario, pero devotamente
(Año: 1633; Nº: 2111; Destinatario: CHERUBINI, Stefano; Destino: Ancona)
  • En necesidad tan urgente, V.R. se tendría que servir de seglares y pagarles bien
(Año: 1635; Nº: 2435; Destinatario: RODRÍGUEZ, Antonio; Destino: Moricone)
  • Es cierto que ese buen Padre tendría intención de ir a vivir entre los pobres, y de una parte tiene razón, por ser nuestra obra más para los pobres que para los ricos. Por otra parte, no tiene razón en abandonar lo cierto por lo incierto
(Año: 1635; Nº: 2434; Destinatario: LUCATELLI, Paolo; Destino: Génova)
  • He recibido carta de V.R. del 13 de agosto en la que me escribe ciertas acusaciones que algunos, más curiosos de la vida ajena que de la propia, lanzan contra mí. A todos los cuales respondo en una palabra que pronto nos veremos todos ante el tribunal de Cristo donde se encontrará y se sabrá la pura verdad y cada cual será juzgado según sus obras. Yo tengo un testimonio de mi vida por encima de toda exigencia, que es el del Papa actual, quien, estando conmigo el P. Castilla, me dijo estas palabras: «contra vos no hay cosa alguna», al ofrecerme yo mismo a responder a todo lo que contra mí se hubiera dicho, y me parece conveniente servirme de aquel dicho común que dice «cum verbosis noli contendere verbis». V.R. procure dar buen ejemplo de sí mismo y deje murmurar a quien lo sabe hacer
(Año: 1646; Nº: 4400; Destinatario: ACCARDO, Tommaso; Destino: Palermo)