Vera de Bidasoa (ES) Colegio

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Aviso de contenido

Este texto es el original publicado en su día en el DENES. No se ha hecho sobre él ninguna rectificación. Su contenido, pues, puede no reflejar la realidad actual

Datos

Demarcación Vasconia

(1891-1943)

Fundación en la provincia de Aragón: 1891-1933.

La población de Vera contó con un convento de capuchinos, que, al ser destruido en la primera guerra carlista, lo abandonaron los religiosos. En 1879 doña Francisca de Etxenike al hacer su testamento nombró heredero fideicomisario a fray Antonio Arandía «para rehabilitar el convento de esta villa y establecer capuchinos. Si no consigue establecer PP. capuchinos, que se funde un colegio dirigido por los PP. escolapios de San José de Calasanz, para una esmerada instrucción de los alumnos en religión, moral, política y letras». Murió la testadora el 1-1-1880. Tras diversos avatares sería don Ramón Goizueta quien realizaría los deseos de la fundadora. El 29-10-1891 llegó a Vera el P. Manuel Acero, Provincial de Aragón, acompañado de su secretario, el P. Pascual Andreu y de los seis religiosos destinados a la nueva fundación; eran los PP. Manuel Gracia, Marcos Quibus, Enrique Carrera, Mariano Moreno y los HH. Sebastián Abaurrea y Félix Larrañaga. Se ubicaron en la casa y en los terrenos que habían sido de doña Francisca; la casa se había levantando en 1827 y se la conocía con el nombre de «Iribarrenea» en el barrio de Álzate.

Contaron en los comienzos con veinte alumnos, que a final de curso ascendieron a veintisiete; fue un colegio de vida muy sencilla y popular; a la manera de una escuela rural. Normalmente contó con tres aulas y el alumnado rondó los cien muchachos. Además de las clases de primera enseñanza tuvo «preceptoría» o escuela de latinidad, teniendo sus alumnos los estudios homologados con el seminario de Pamplona. D. Antonio Ruiz Cabal, obispo de la diócesis, fue desde el primer momento protector y amigo del colegio. En 1892 abrió una suscripción para la construcción de la iglesia del mismo, encabezándola el propio prelado con 3.500 pesetas. El 13-3-1893 bendijo la primera piedra; la obra se realizó con los planos de don José M. Múgica. Cuando estuvo terminada la inauguró el mismo Sr. obispo el 12-10-1896, en solemne pontifical, asistido por el arcipreste de Vera, los párrocos de Lesaka y Etxalar y primeras autoridades. Fue dedicada a San Antonio de Padua en honor del nombre del obispo.

Sin embargo la situación económica fue siempre muy precaria, no tanto por las estrecheces, cuanto por la inseguridad y falta de contrato. Los escolapios vivieron sin otra base que la mayor o menor inteligencia con don Ramón Goizueta. Los rectores acusaron a éste en ocasiones de abuso de atribuciones, pues él no era nadie para poner normas o condiciones, sino que debía ser mero ejecutor de la voluntad de la fundadora. En 1912 se pretendió normalizar la situación creando el mismo Sr. Goizueta una «Pía fundación de enseñanza religiosa» ante el notario de Lesaka, don José Valcarlos Irisarri. Poco o nada se arregló con ello. En 1926, el P. Pablo Zugasti mandó un ultimátum a la honorable Junta del patronato. Años después, el P. Mariano Moreno, uno de los fundadores, se queja de la ejecución de la última voluntad de doña Francisca, pues está demorada después de 39 años y obliga a vivirse en precario.

Cierre en la provincia de Vasconia: 1933-1943.

Al fundarse la Provincia de Vasconia este colegio fue entregado a la misma por la situación geográfica, aunque de todos era evidente su situación agónica. Así en el curso 1942-1943 la Congregación provincial decidió cerrar aquella casa. El Provincial, Gonzalo Etayo, así se lo comunicó a la Junta del patronato, alegando la alarmante crisis económica de la Provincia y la difícil situación de los colegios. El domingo 8-8-1943 el P. Juan Bautista Pérez Altuna entregaba las llaves del edificio y el inventario de lo que en él quedaba al párroco don José Goikoetxea y al alcalde don Doroteo Leguía.

Aunque fue siempre un colegio humilde y sencillo, no faltaron entre sus alumnos personas que le dieron gloria como el jesuita y humanista P. Ignacio Errandonea, el pintor Juan Larramendi, el músico y escritor Isidoro Fagoaga y el obispo Jacinto Argaya.

Superiores

Persona Año
Manuel Gracia 1891
Leonardo Martínez 1897
Anselmo Viruete 1900
Miguel Mareca 1919
Martín Enfedaque 1920
Raimundo Esteban 1924
Pablo Zugasti 1925
Joaquín Perdices 1928
Mariano Moreno 1929
Luis Larramendi 1931
Patricio Arratíbel 1934
Sebastián Iribarren 1938

Bibliografía

  • Archivo Vasconia
  • «Vasconia» 22: Escuelas Pías de Vera de Bidasoa (1891-1943).

Redactor(es)

  • Javier Ortigosa, en 1990, artículo original del DENES I