DelMonteVisitaGeneral/APÉNDICES/ORDENANZAS San Jorge

ORDENANZAS de la Visita General Apostólica para nuestra Casa de San Jorge tenida en el mes de junio de 1696.

Sobre cuestiones de la iglesia

Los manteles que se ponen en los tres altares serán de la forma indicada en las rúbricas. Ante el Santísimo Sacramento arderá de manera continuada día y noche una lámpara. En la sacristía hágase un nicho para guardar el Santo Crisma bajo llave, y con una inscripción. En la dirección de la cofradía de la Anunciación de la Virgen no se introduzca ninguna innovación sin contar con e P. Rector, sino que debe observarse siempre el mismo ritual. Nuestros juniores muestren en todas partes, y principalmente cuando ayudan a misa, una modestia angélica en los ojos, en las manos, y en el aspecto de todo el cuerpo. Damos permiso por ciertas razones para que la casa de San Jorge ponga en la iglesia un cepillo para recoger limosnas.

Sobre la observancia regular

Nadie se mezcle en los oficios ajenos, a no ser que se lo mande el Superior. Absténganse absolutamente de hablar mal de nadie, tanto en público como en privado. Ausente el P. Rector, solo el sacerdote más antiguo en profesión, señalado por él, dirigirá la casa. Los enfermos sean servidos tal como dice el capítulo 9 de la 1ª parte de nuestras Constituciones. Nadie use medicinas sin estar de hecho enfermo. Nadie vaya a la puerta o a otros lugares aislados para hablar con gente de fuera. No se descuiden los ejercicios comunes. Prohibimos que vayan a beber y cosas similares a casa de seglares, máxime acatólicos. Todo el ámbito del colegio está sometido al régimen de clausura.

Sobre el ministerio de las Escuelas Pías

Nadie llame a los estudiantes mientras están trabajando en la escuela, u ocuparlos del modo que sea. Nadie lleve a su habitación sin pedir permiso cada vez pensionistas o niños, ni permita que vaguen por alguna parte de la casa. Rogamos al P. Rector que enseñe griego cada día a los maestros, y ellos a los escolares. Ábrase una clase para comenzar a estudiar Retórica y Poética. Si no se puede tener la oración continua a causa del escaso número de alumnos, mientras no crezca su número, obsérvese el sistema introducido por el P. Rector. Pero si aumenta el número, obsérvese los que dice el cap. 9 de la 2ª parte de las Constituciones, y además lo prescrito en nuestras ordenanzas.

Sobre cuestiones económicas

Dése cuenta muy clara de los gastos hechos, y cómprense las cosas a tiempo para conseguirlas a mejor precio. Sáquese el humo de la cocina para que no moleste a los que trabajan allí. La ropa sea del mismo material y forma regular, hecha a tiempo en la medida de lo posible, según nuestras ordenanzas. Nadie guarde dinero consigo, excepto el ecónomo, sino que se deposite todo en la caja inmediatamente, según los Decretos de Clemente VIII sobre la Reforma nº 12 y 13. Prohibimos que en la mesa haya cuchillos, tenedores o cucharas de uso particular; por lo demás, adquiérase suficiente número de ellos para la comunidad y huéspedes. Los pensionistas no se sienten en la mesa común, ni nadie los trate con favoritismo, sino que se prepare cuanto antes un lugar para ellos en alguna parte alejada de la comunidad.

En Nikolsburg, a 7 de junio de 1696.

Juan Francisco de S. Pedro, prepósito General, las confirma, y las manda observar perpetuamente junto con el ejercicio de nuestra Cofradía de la Anunciación de S. Jorge.